Repasemos ahora algunos de los negocios que se instalaron allí entre finales del siglo XIX y todo el siglo XX, comenzando con el lado de los pares, es decir, partiendo de la Plaza de la Magdalena, por la parte derecha.
LADO DE LOS PARES.
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Restaurante Niño Malo en 2024 |
En el primer edificio que nos encontramos, actual restaurante Niño Malo, estuvo, desde principios del siglo XIX, la ya citada pastelería de Granullaque, que perduró durante más de cien años para finalmente transformarse en hotel-restaurante. Mucho hay escrito sobre ella, pero no está de más recopilar y ordenar lo más destacado de las seis generaciones de aquel negocio familiar.
La primera noticia conocida sobre los Granullaque en Toledo es de 1778. En el conocido Libro vecindario y matrícula de vecinos por parroquias para el repartimiento de la contribución de Utensilios en la ciudad de Toledo y su término, (Archivo Municipal de Toledo), se constata la existencia en la calle Sillería de la pastelería de Teresa Raimundo, viuda de Andrés Granullaque. Teresa vive con sus hijos Andrés, Vicenta y Fermina. Trabajando allí también aparece Cayetano Granullaque. Esta debe ser la primera generación de pasteleros de la saga, aunque poco más podemos decir de ellos, salvo que su hijo Andrés Granullaque Raimundo, será el pastelero que más tarde se instalará en la plaza de Barrio Rey.
Andrés Granullaque Raimundo, vuelve a aparecer en 1807 ya como maestro pastelero. Fue en una sesión del Ayuntamiento de Toledo celebrada en la Sala Capitular en el que se le nombra veedor del gremio de los pasteleros.
También aparece Andrés en el padrón elaborado en la Guerra de la Independencia por proclama de la Junta permanente de Toledo en agosto de 1808. Se le anota como pastelero, en la colación de la Magdalena, por lo que ya estaba en esa fecha en la plaza de Barrio Rey.
El siguiente en la línea sucesoria de la pastelería fue Antonio Granullaque Sánchez, que no era hijo de Andrés como aparece en varias fuentes, sino de Santiago Granullaque e Isidra Sánchez, ambos naturales de Madrid. Antonio nació sobre 1811 y pudiera ser que fuera sobrino de Andrés. Si consultamos en el BOP la contribución industrial de 1852, vemos que el único pastelero que hay en la ciudad de Toledo es Antonio Granullaque, mientras que aparecen diez confiteros, entre los que está el famoso Cipriano Labrador en la Plazuela de la Magdalena.
En 1851 ya funciona también como restaurante, así nos lo indica Pedro Pablo Blanco y Manuel de Assas en su Guía del viajero en Toledo.
Pastelerías. Son dos: una situada en la Plaza de Zocodover o de la Constitución, y otra en la plazuela de Barrio Rey: en esta se sirve de comer a precios muy arreglados, y en la otra solo cosas de pasta.
En 1863 se anuncia en el Anuario general del comercio, de la industria y de las profesiones de la magistratura y de la administración (BNE), como pastelería que surte toda clase de pastas y asados.
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Anuncio en Anuario general del comercio, de la industria y de las profesiones. 1863. Fuente: Universidad Complutense de Madrid. |
Antonio Granullaque Sánchez se casó con Rosa García y tuvieron tres hijos, Antonio, Leandro y Mariano. Se hicieron cargo de la pastelería hasta el fallecimiento de Antonio, sobre 1870, sucediéndole su hijo Antonio Granullaque García, nacido en Barrio Rey el 29 de marzo de 1844.
Antonio Granullaque García, fue el que proporcionó más fama al restaurante. Bien es sabido que acudían allí numerosas personalidades entre la que destaca Benito Pérez Galdós, que lo cita en su novela toledana Ángel Guerra de 1891. Antonio estaba casado con Martina García Velasco y muere en octubre de 1889, sucediéndole su hijo Aurelio.
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Toledo industrial y comercial. 1906. AMT. |
Aurelio Granullaque García lleva el restaurante hasta su prematuro fallecimiento en 1902, por lo que el negocio pasa a denominarse Viuda e Hijos de Granullaque. La viuda era Sinforiana Díaz Hernández, natural de Olías que quedó a cargo del negocio con tres hijos pequeños llamados María Luisa, Carlos y Julio Granullaque Díaz. Se nombra tutor de los tres hijos en un primer momento a Juan Manuel Moro, el dueño del Bazar Moro, que debía ser amigo de la familia.
Poco después, Sinforiana Díaz se caso en segundas nupcias con Adolfo Aragonés de la Encarnación, natural de Guadalajara, maestro de obras militares que fue miembro de la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo y presidente de la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Toledo. Adolfo aparece a partir de entonces como gestor del negocio y junto con Sinforiana intentan adaptarse a los nuevos tiempos que vienen con el siglo XX. A partir de 1905 el restaurante comienza a anunciarse en la prensa y al poco tiempo construyen el edificio actual para albergar el nuevo hotel restaurante, inaugurado en 1912, aprovechando el auge del turismo.
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Nuevo Hotel Granullaque. Extraído del libro Toledo: páginas de su historia de Adolfo Aragonés. |
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Postal del Hotel Granullaque. AMT |
Una vez alcanzada la mayoría de edad, Carlos Granullaque Díaz se hace cargo del Hotel Restaurante en los últimos años de su existencia, pues la Guerra Civil supone el final de su larga historia. La Plaza de Barrio Rey fue golpeada por los combates entre las fuerzas que apoyaban el golpe, parapetados en el cercano Alcázar, y las leales a la República, sufriendo graves daños, aunque afortunadamente este edificio conservó muchos de los elementos de la construcción primitiva.
En 1937 ya no encontramos rastro del Granullaque. Se establece allí el Restaurante Italia, de Gaetano Belsito que anuncia diferentes cócteles denominados Imperio, usando el logotipo del periódico del mismo nombre publicado por la Falange. Este restaurante estuvo activo, al menos, hasta finales de 1939, que anunciaba su traspaso.
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Anuncio del Bar Restaurante Italia en 1937. AMT |
Después, a mediados de los años 40, le sucedió el restaurante Casa Juanito que ofrecía como antiguamente lo hacía Granullaque el cabrito asado y las perdices estofadas. Casa Juanito es todavía recordado en la ciudad pues estuvo activo hasta los años 70.
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Anuncio Casa Juanito en 1944. AMT |
A finales de 1988, después de una reforma, estableció alli su sede el Banco de Fomento, cambiando el rótulo en 1996 para albergar la primera oficina de Caja España en la capital regional, que adquirió muchas de las sucursales del Banco de Fomento para iniciar su expansión fuera de Castilla y León.
En los pisos superiores ha habido numerosas empresas. A principios de los 60, llegó la constructora García y Lozoya. También tuvieron su sede en este edificio los periódicos La Voz del Tajo y El Día de Toledo o la agencia de viajes Toledo Servicios Turísticos.
En 2018 el Ayuntamiento dedicó la plaza a la Federación Empresarial Toledana FEDETO, creada en 1977, colocando una placa en este edificio para recordar el cuarenta aniversario de su fundación.
En el espacio donde se ubicó Granullaque, hemos conocido, ya en el siglo XXI, el Restaurante La Mar de Bien, La Cofrería y actualmente el restaurante El Niño Malo. Todos los negocios preservaron las columnas de hierro del Hotel Restaurante Granullaque proyectado por el arquitecto Ezequiel Martín a principios del siglo XX, y que aún podemos contemplar en el interior.
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El Niño Malo vigilando la Plaza. 2025 |
- TRAVESÍA.
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Travesía de Barrio Rey. 2025 |
En la Travesía de Barrio Rey, que conecta la Plaza con la Cuesta del Alcázar nos detenemos en el primer edificio de la derecha entrando desde la plaza. En 1901, estuvo allí la taberna de Braulio Gutiérrez que en 1914 era de Julián Gutiérrez. En 1917, Hilario Rodríguez estableció la casa de Huéspedes La Itálica, teniendo restaurante con el mismo nombre pero en la Plazuela.
En 1923, había unos compradores de alhajas llamados Jaspe Hermanos, y ese mismo año Joaquín Guerra Corroto, natural de Polán abre La Nueva, casa de huéspedes y restaurante, que en 1935 ya se publicitaba como Casa Guerra. Este negocio perduró hasta los años 50.
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Anuncio de La Nueva en 1923. AMT |
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Anuncio de Casa Guerra en El Alcázar. 1938. AMT |
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Anuncio de La Nueva en 1940. AMT. |
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En ese mismo local, en 1962, estableció su sede central la Caja de Ahorros Provincial de Toledo después de haberse creado en 1957 y permanecer los primeros años en las dependencias de la Diputación Provincial (al principio se denominó Caja de Ahorros Provincial de la Excma. Diputación Provincial de Toledo). La sede central estuvo allí hasta 1968 año en el que se trasladó a la Calle Nueva, enfrente del Banco de España, edificio adquirido inicialmente por la Caja para albergar la Obra Social. Más tarde, en 1972, se trasladó la sede al Palacio de Benacazón.
El local conserva aún el dintel de madera de aquella primitiva sede de la Caja de Ahorros.
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Anuncio de la Caja de Ahorro Provincial de Toledo en 1962. AMT |
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Dintel de la sede de la Caja de Ahorros Provincial de Toledo. 2025. |
Últimamente, hubo en ese local, un supermercado llamado
Minimarket. Los otros edificios de la travesía, aparte del que da a la Plaza de Barrio Rey son los que tienen la fachada principal hacia la Cuesta del Alcázar. En el número 1 de la travesía está establecida actualmente la empresa de visitas guiadas
Patrimonio Toledo.
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Bar Plaza en 2024 |
Pasamos al lado central de la Plaza, actual Bar Plaza, donde había a principios del siglo XX un colegio llamado Nuestra Señora de la Paz, cuyo director era Francisco Ruiz de la Llave y Sánchez, natural de Carriches. El colegio se trasladó a la Calle Cárcel del Vicario en 1904.
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Anuncio del traslado del Colegio Nuestra Señora de la Paz en 1904. BVPH. |
No he encontrado en la primera mitad del siglo XX, negocios en esa parte de la plaza, estando alli el acceso a diferentes viviendas, hasta que en 1959, Teodoro Martín García, que tuvo desde principios de los años 50 el Bar Peña Torrijos en la Cuesta de las Armas, 4, abrió el Bar Condestable. Teodoro mantuvo el Bar con ese nombre hasta 1964, cuando él mismo cambió su denominación a Bar Restaurante Torrijos.
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Anuncio del Bar Restaurante Condestable en 1959. AMT. |
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Bar Torrijos en 1964. AMT |
Mas tarde, volvió a su denominación original, Bar Restaurante Condestable, hasta que en 1975 se transformó en el actual Bar Plaza. El Plaza cumple en 2025 cincuenta años de existencia ininterrumpida en el mismo lugar y con el mismo nombre.
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Anuncio Bar Restaurante Plaza en 1975. AMT. |
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Bar Plaza en 2005. Fotografía de Sandra Gómez para La Tribuna. BVPH |
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Cartel del Bar Plaza desde la travesía. 2025. |
- NÚMERO 6.
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Bar Tierra en 2024 |
En el lugar que ocupa hoy el Bar Nueva Tierra, en 1917 abre el Restaurant y Casa de viajeros La Itálica, de Hilario Rodríguez García, natural de Bargas y Antonia Pérez Corroto, de Gálvez. La casa de viajeros estaba en la travesía de Barrio Rey. Hilario tuvo un restaurante llamado El Petit en la Calle Sierpe (en el número 6, actual La Nueva Bóveda), donde Guillermo López tuvo antes el Petit Fornos. El hijo de Hilario (Hilario Rodríguez Pérez) fue el que abrió el restaurante El Nido, en 1939, en la Plaza de la Magdalena.
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Anuncio de La Itálica de Hilario Rodríguez en 1917. AMT |
En 1924 ya funciona el Restaurante Casa Pacole, de Alejandro Torres Martín. Al principio el restaurante se denominaba A. Torres. Estuvo activo hasta 1929 y luego se trasladó a la Cuesta de Las Armas, enfrente del Miradero.
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Anuncio de Casa Pacolé (A. Torres) en 1924. AMT |
Antes del estallido de la Guerra Civil tenemos el Restaurante Casa Plácido, de Plácido Sánchez Torres, de Ajofrín. En 1936, Plácido muere a manos de los milicianos, pasando brevemente a ser Hijos de Plácido. (No confundir con el Restaurante Plácido de la Calle Santo Tomé que debe su nombre a Plácido Salamanca de la Torre).
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Casa Plácido en Barrio Rey poco antes de la Guerra Civil. Archivo de la Diputación Provincial de Toledo. |
En los años 40, abre el Bar Restaurante La Parrilla, uno de los referentes de la hostelería en Toledo durante más de cuarenta años. Fueron famosos sus huevos rellenos, vendiéndose allí los primeros perritos calientes en nuestra ciudad. Estuvo abierto hasta finales de los años 80.
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Turistas franceses en Barrio Rey. Del Blog Toledo Olvidado (Cortesía de Eduardo Sánchez Butragueño) |
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Anuncio Restaurante La Parrilla en 1971. AMT |
Ya en el siglo XXI hemos visto en esa ubicación el Restaurante Ágapo, que tenia también alojamiento en los pisos superiores. Actualmente tenemos el Bar Nueva Tierra, heredero del Tierra, de Juan José Abascal Molinos, heredero a su vez del que existió en la Plaza Horno de la Magdalena (actual Restaurante La Posta)
- NÚMERO 8.
El último edificio de la calle es el que da a la Plaza de Zocodover y albergó durante varias décadas, con entrada por la Plaza, una de los locales de la salchichería Casa Díaz. En los pisos superiores con entrada por Barrio Rey estuvo a finales de los 80 la peluquería Coqueta.
En esa esquina, desde hace muchos años se cuelgan las esquelas mortuorias, al ser un lugar de paso habitual del vecindario de la ciudad.
Volvamos sobre nuestros pasos hacia la Plaza de la Magdalena y repasemos los negocios del lado de los impares.
LADO DE LOS IMPARES.
En el número 1, actual restaurante Asadero, tenemos en 1905 la última pescadería que hubo en Barrio Rey. Era La Santanderina de Francisco Duro.
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Anuncio de la Pescadería La Santanderina. 1905. BVCLM. |
El siguiente negocio es otro de los que desaparecieron en la Guerra Civil. Es el Restaurante Royalty, que abrió a finales del año 1928. Posiblemente el nombre esté inspirado en el Cine Royalty que desde 1914 hasta los años 30 funcionó en la calle Génova de Madrid (luego se denominó Cine Colón). Fue abierto por un antiguo camarero del Suizo y del Bar Toledo Francisco Félix Ruedas, y un antiguo cocinero del Café Español Francisco Serrano.
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Anuncio del Restaurante Royalty a finales de 1928. AMT |
Después de la Guerra, en 1940, comienza su actividad el Restaurante Cervantes, que se anuncia como antiguo Royalty. Lo trasladó allí Daniel Lucas Garijo desde la Plaza de Zocodover. En 1949 era de Justino de Castro.
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Anuncio del Restaurante Cervantes. 1940. AMT |
En 1952 cambia totalmente el uso del local y se instala allí la Sastrería de Herrada. Esta Sastrería, de Dionisio Herrada Martín, estuvo activa hasta 1984 y fue una de las ultimas sastrerías clasicas que perduró en el centro de Toledo junto con la de Cantos, Ángel Martín o la de Bernardo Ruiz.
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Anuncio de la Sastrería Herrada en 1954. AMT. |
En 1984 abrió la conocida Cafetería Royal de José Antonio Gelado. Luego se hizo cargo de ella su esposa Pilar Cid.
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Bar Royal en 2005. Fotografía de Sandra Gómez para La Tribuna. BVPH. |
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Azucarillo del Bar Royal en los años 80. Archivo Municipal de Toledo. |
En el siglo XX han estado en este local la taberna La Dehesa y el restaurante Asador a la brasa.
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Tienda de artesanía Ataujía en 2025. |
En el número 3 actual, desde 1899 hasta 1908, que se incendiaron, estuvieron en esta ubicación los Almacenes El Siglo, que se ampliaron con este espacio desde el local que actualmente ocupa el restaurante Barrio.
En 1909, después del incendio, se traslada allí la tienda de coloniales de Vicente Obeo López-Delgado, casado con Teresa Lalanda Martín. Vicente Obeo tenía desde 1905, La Tienda Chica en la Plaza de la Magdalena, 4. Vicente luego fue durante años empleado del Banco de España y agente comercial.
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Anuncio de la tienda de coloniales de Vicente Obeo en 1909. BVPH |
En 1912 la tienda cambia de manos y pasa a ser la tienda de ultramarinos La Favorita de Mariano Hernández Moreno, natural de Seseña. Esta tienda estuvo activa hasta, al menos, 1917.
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Anuncio de la tienda de ultramarinos La Favorita en 1912. BVPH |
En 1922 estaba la buñolería de Tomás Martín, activa hasta la Guerra Civil, salvo una temporada, en 1927, que ocupó el local la Zapatería de Adrián Valtueña Calonge, que se anunciaba en el periódico El Proletario.
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Anuncio de la Alpargatería de Adrián Valtueña en 1927. BVPH. |
Hasta 1939 no hubo más negocios en ese local. En ese año se instala el bar Casa Molero, que permaneció abierto hasta 1977. Regentado por Urbano Molero Molero, era famoso, entre otras delicias, por sus chorizos al infierno.
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Anuncio de Casa Molero en 1940. AMT |
Ya en los años 80 aparece la tienda de Confecciones Maeso, de la familia Francisco Maeso Guzmán que permaneció allí hasta principios del siglo XX. Actualmente se ubica la tienda taller artesana Ataujía.
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Restos del rótulo de Maeso y trampantojo en el edificio. 2025. |
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Tienda Ataujía en 2025 |
- NÚMERO 5.
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Hotel Barrio Rey y Restaurante Barrio en 2024. |
Pasamos ahora al espacio que ocupa el Hotel Barrio Rey y el Restaurante Barrio. El antiguo edificio era, al menos desde 1862, propiedad de Vicente del Valle Ortíz deTaranco, pasando más tarde a Epifanio de la Azuela cuya madre, Eulogia López del Valle era hermana de Vicente.
En la antigua edificación, estuvo al menos entre 1886 y 1892 un establecimiento hostelero de nombre novelesco: el Gran Hospedaje del Universo. Este hospedaje aparece en varias guías de aquellos años pero sin datos para saber su ubicación exacta, que podemos conocer por una de las cartas que el pintor holandés Jacobus Van Looy le manda a su compatriota el poeta Albert Verwey. En ella le indica la dirección del Gran Hospedaje del Universo al objeto de que pudiese contestar a sus misivas mientras durase su estancia en Toledo. Pudiera ser este negocio de Jesús García Herrero Gutiérrez, natural de Guadamur, que aparece en esta dirección como industrial en un censo de electores de 1889.
En 1898 se llevaron a cabo en aquel local algunas sesiones del incipiente cinematógrafo a cargo de Rafael Hernández, y en ese mismo año tenemos allí los Almacenes El Siglo (se acercaba el fin del siglo XIX), que estaban gestionados por los hermanos Gullón, de Quintanar de la Orden. Al principio solo ocupaban el número 7, pero los Gullón ampliaron el negocio en 1899 abarcando los números 3 y 5. Estos almacenes se incendiaron en febrero de 1908.
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Anuncio de los almacenes El Siglo. 1898. BVPH |
En 1922 Epifanio de la Azuela promueve la construcción del edificio que se conserva actualmente aunque tuvo posteriormente varias reformas. El arquitecto fue Juan García Ramírez y el primer negocio que albergó fue la Confitería El Hueso Dulce del propio Epifanio de la Azuela, haciendo referencia a los huesos de los famosos albaricoques toledanos. La confitería fue también obrador de mazapán y estuvo activa hasta 1931 aunque los dos últimos años estuvo a cargo de F. Larrazabal.
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Anuncios de El Hueso Dulce en 1922 y 1923. AMT. |
En 1929 tenía su tienda de alimentación Antonio Nisa que enseguida trasladó a la calle de la Plata. Es en 1930 cuando el toledano Clemente Galiano Segovia establece allí la Pensión Maravilla y un poco más tarde, en 1931 el restaurante del mismo nombre, trasladando el que tenía en el local donde ahora está el restaurante El Zoco.
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Anuncio de la Pensión Maravilla en 1930. BVPH |
Después de la Guerra Civil el negocio pasó a ser Viuda de Clemente Galiano. La viuda era Sabina Martínez Pastor, que era natural de Cornago (Logroño).
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Fachada del edificio del Hotel Maravilla, todavía con algunos destrozos provocados en la Guerra Civil. Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. Archivo Histórico Provincial de Toledo.Fondo Rodríguez (AHPTO 11403/64). |
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Anuncios del Hotel Maravilla en 1942 y 1987. AMT |
El Hotel y Restaurante Maravilla han estado funcionando hasta 2015, año en el que se hizo la última reforma del edificio que actualmente alberga el Hotel Barrio Rey y el Restaurante Barrio.
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El restaurante y hotel Maravilla poco antes de su cierre. Captura de Google Maps. |
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La corona del Rey de Barrio. 2025 |
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Restaurante El Zoco en 2024 |
En el lugar donde está el restaurante El Zoco, Florencio del Monte (sucesor de Benito) trasladó en 1898 la Sastrería que tenía en la Plaza de Zocodover, aunque debió durar muy poco pues en 1900 estaba en ese número la pescadería de Luis Soler y Compañía.
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Anuncio de la Sastrería de Florencio del Monte en 1898. BVPH. |
Después de la pescadería, Arturo Vega Salgado puso una casa de vinos y comidas. También tenía habitaciones en la planta baja, principal y segundo. El negocio se traspasaba en 1904.
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Anuncio de traspaso del establecimiento de vinos y comidas de Arturo Vega. 1904. BVCLM. |
No sabemos si se traspasó el negocio, el caso es que en 1910 era un restaurante de su hermano Faustino Vega Salgado que lo mantuvo hasta los años 20. Arturo Vega y su hermano Faustino eran naturales de Otero (Lugo).
Faustino Vega estaba casado con Apolonia de Castro y Peces-Barba y falleció en 1922.
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Anuncio del Restaurant de Faustino Vega en 1910. BVPH |
El siguiente negocio que se estableció allí fue otro restaurante a cargo de Clemente Galiano que ya estaba allí en 1928. Clemente estaba casado con Sabina Martínez Pastor.
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Anuncio del Bar Restaurante de Clemente Galiano en 1929. BVPH |
En 1930, Clemente Galiano abrió la Pensión Maravilla en el edificio de al lado y trasladó allí también el restaurante.
El siguiente negocio que he encontrado es el Restaurante Casa Paco, que estaba activo en 1935 y que quedó destrozado en la Guerra Civil. Era de Francisco Benito Fernández, natural de Almonacid.
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Anuncio de Casa Paco en 1933 |
Finalmente, el restaurante El Zoco se abrió en 1937, por lo que va camino de los 90 años de vida en el mismo lugar y con el mismo nombre.
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Anuncio de El Zoco en 1937. BVPH. |
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Azulejos en el Restaurante El Zoco. 2024. |
- NÚMERO 9.
El último número de los impares es un edificio con la fachada hacia la Plaza de Zocodover. El edificio actual es 1907 y albergó durante muchos años la Confitería de Telesforo de la Fuente al trasladarse desde los soportales de enfrente (actual Restaurante Burguer King)
En los pisos superiores, con entrada por Barrio Rey, estuvo en los años 80 y 90 TER (Instituto de medicina, estética y salud), de Teresa Velasco y también la sede de Diario 16 Castilla-La Mancha.
Actualmente está allí la sede del diario ABC Toledo con entrada por la puerta en la que vemos en su parte superior el año 1907, la fecha del edificio.
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Número 9 de la calle Barrio Rey. 2025 |
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Cartel de la sede de ABC Toledo. Pantallazo Google Maps. |
Finalizo este paseo por Barrio Rey con algunos enlaces del Archivo Municipal de Toledo, magníficamente dirigido por Mariano Ruipérez, que completan y mejoran la información sobre esta entrada. No hace falta leerlos ahora, puede ser un poco más tarde tomando algo en Barrio Rey.
Fernando Riaño Sánchez de la Poza.
- En el artículo de la serie que publica ABC Vivir Toledo, Rafael del Cerro Malagón nos cuenta los detalles de la construcción del nuevo hotel Granullaque y allí podemos ver, por ejemplo, como las columnas de hierro del interior se mantienen tal cual las vemos ahora en el Niño Malo.
Dos edificios del Arquitecto Ezequiel Martín en Zocodover y Barrio Rey (1897 y 1911)
En esta otra entrega de Vivir Toledo Rafael del Cerro nos habla del proyecto municipal en los años 20 para construir una Gran Vía Toledana desde Zocodover a la Magdalena por Barrio Rey. Afortunadamente no se llevó a cabo.
- Adolfo Aragonés fue un estudioso de Toledo, y recopila información sobre los Granullaque. En su libro de artículos aparecidos en prensa Toledo: páginas de su historia, publicada por la Real Sociedad de Amigos del País e impresa por Rafael Gómez-Menor en 1928, aparece el artículo publicado en marzo de 1922 en la revista Toledo: revista de arte, dedicado a la pastelería restaurante de Barrio Rey.
- Existe otra descripción con plano del antiguo restaurante en la revista Centenario del Greco: revista dedicada a la memoria del insigne pintor de 1924, editada por Juan Moraleda y Esteban. Hay un relato llamado La Hostería de la Negra y el Greco escrito por Javier Soravilla.
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