CONFITERÍA SANTO TOMÉ
Segunda entrada de las dedicadas a los obradores de Mazapán de la ciudad de Toledo con IGP (Indicación Geográfica Protegida) Mazapán de Toledo. La primera estuvo dedicada a Mazapanes Barroso y la presente a Santo Tomé, quedando pendiente, la de San Telesforo.
(Recomiendo en todo caso la lectura del libro El Mazapán de Toledo y su Historia. La Confitería de Santo Tomé, edición de Antonio Pareja y escrito por Rafael del Cerro Malagón, Mariano García Ruipérez, Antonio Pareja Jiménez y Enrique Sánchez Lubián).
El origen conocido de la confitería y obrador de mazapán Santo Tomé viene de la mano de Francisco Pérez Hernández, natural de Burguillos y la toledana Dorotea Ilocho.
En el acta de nacimiento de Amparo, la primogénita de Francisco y Dorotea, de 14 de mayo de 1855, conservada en el Archivo Municipal de Toledo, ya aparece Francisco como confitero. En ese acta, consta que el bautizo se hizo en la parroquia de San Juan Bautista, por lo que ese año de 1855 ya debían tener la confitería en la Plaza de las Tendillas.
Aunque si hacemos caso a los anuncios que en 1897 del sucesor de Francisco y Dorotea, su hijo Eleuterio, la fundación de la que hoy es Santo Tomé, se remonta a 1834. No sabemos si la confitería se abrió en la Plaza de las Tendillas en aquel año o en alguna otra ubicación. En todo caso, en ese año la propiedad, por edad, no podía ser de Francisco Pérez Hernández. Tuvo que haber otra generación anterior.
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| Anuncio en El Día de Toledo en enero de 1897 con la indicación casa fundada en el año 1834. BVPH. |
Los padres de Francisco fueron Benito Pérez y Francisca Hernández, ambos de Burguillos. Los padres de Dorotea Ilocho eran Rufino Ilocho, de Toledo, de profesión procurador, y Juana Villarrubia, de Yuncler.
El más pequeño de los hermanos, Eleuterio Pérez Ilocho se incorporó pronto al trabajo en las Tendillas y se convirtió en el sucesor de Francisco.
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| Fotografía de Eleuterio Pérez Ilocho en El Día de Toledo. 1897. Biblioteca Virtual de Prensa Histórica. |
En aquellos años eran muy celebradas las exposiciones de productos en los escaparates con vistas a la campaña de Navidad. Eleuterio se anunciaba con una exposición permanente.
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| Anuncio en El Nuevo Ateneo en diciembre de 1887. Biblioteca Virtual de Prensa Histórica (Ministerio de Cultura) |
Al lado de la confitería. los funcionarios de Hacienda, encargaban los famosos ramilletes. Vemos la descripción de uno de ellos, con ocasión del cumpleaños del Delegado Luis Garrido:
Los empleados de Hacienda obsequiaron á su digno Jefe D. Luis Garrido en el dia de su santo con un magnífico ramillete, digno de la fama de los Sres. Pérez Hernandez, y obra de D. Eleuterio Pérez, á quien felicitamos por su trabajo.
La elegancia y variedad del obsequio, ha llamado justamente la atencion de sus admiradores sobre una canastilla de turrón adonde se unían cuatro cuernos de la abundancia, se elevaban cuatro arcos, que sostenían otros tantos tiestos con flores francesas; el tercer cuerpo figuraba un jarron de azúcar, sobre el que se veían otros cuatro cuernos que derramaban columnas de azúcar cristalizada; sobre otra columna de turrón que sostenía otra canastilla, se elevaba una piña donde se sostenía un encantador grupo de dos prendidos; el relleno era de lo mejor: su altura de metro y medio próximamente.
El Sr. Delegado correspondió con un petite lunch, donde no escasearon los dulces y cigarros.
Eleuterio formó matrimonio con Isidora Montes de Pablos, y tuvieron cuatro hijos: Francisco, Martina, Pedro y Julio.
A finales de 1896, Eleuterio abrió una sucursal en la Puerta Llana, en el lugar donde actualmente está la Tienda de la Catedral.
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| Antigua confitería de Eleuterio Pérez Ilocho enfrente de la Puerta Llana. Actual Tienda de la Catedral. |
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| Anuncio en El Día de Toledo. 1897. BVPH |
La confitería original de las Tendillas fue la parte más cercana a la Delegación de Hacienda, y en 1897 se ampliaría con el salón de meriendas.
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| Tienda de comestibles en la antigua ubicación de la confitería de Pérez Hernández. |
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| Ubicación del antiguo salón de meriendas de la confitería de Eleuterio Pérez Ilocho. |
Eleuterio, buen amigo del pintor José Vera, le encargó la decoración de los techos de aquel salón de meriendas, que firmó en 1897. Se inauguró en mayo de aquel año, poco después de fallecimiento temprano de Eleuterio, cuando la confitería ya tenia la denominación de Viuda de Pérez.
La decoración de aquel salón de meriendas puede contemplarse hoy día en la tienda de antigüedades Toledo Antiques, de Pedro L. Rodriguez Carrascosa, y en el contiguo restaurante La Clandestina.
Poco después de cambiar la denominación a Viuda de Pérez, un sobrino de Francisco Pérez Hernández, Francisco Martínez Pérez, también natural de Burguillos, fue el siguiente en hacerse cargo del negocio.
En 1899 ya se anunciaba como la Confitería Chica a nombre de Sobrino de Perez Hernández.
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| Anuncio de la Confitería Chica en La Idea: semanario republicano en 1899. Archivo Municipal de Toledo. |
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| Francisco Martínez Pérez en 1899. Nuevo Mundo. Biblioteca Nacional de España. |
Es en 1901 cuando Francisco Martínez Pérez se traslada a la confitería de la calle Santo Tomé, donde permanece actualmente el obrador.
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| Anuncio en El Heraldo Toledano en 1905. BVPH |
En la ubicación de Santo Tomé, estaba anteriormente, desde 1898, el confitero Telesforo de la Fuente, que se había casado con Milagros Martínez Pérez, hermana de Francisco. Telesforo abre ese mismo año otra en la Plaza de Zocodover, en el local donde actualmente está también la confitería de Santo Tomé.
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| Anuncio de Telesforo de la Fuente en 1898. BBVPH |
El traslado de Francisco Martínez a la calle de Santo Tomé se hizo tras el matrimonio de Isidora Montes, la viuda de Eleuterio Pérez Ilocho, con Esteban Mariano Gómez Monreal, que pasó a regentar la de las Tendillas, la de la Puerta Llana, e incluso la antigua de Cipriano Labrador en la Plaza de la Magdalena. Mariano Gómez había empezado como dependiente en la confitería de la Puerta Llana.
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| Anuncio en La Idea: Semanario Republicano en 1905. AMT. |
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| La confitería de Segundo de Lucas en la Guía práctica de Toledo y su provincia (Guías Arco). 1906. AMT. |
En 1912, en las Tendillas, se anunciaba Hijo de Pérez Hernández, volviendo a aparecer como año de fundación, 1834.
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| Anuncio de la Confitería de las Tendillas en 1912. Biblioteca virtual de Castilla-La Mancha. |
Seis años más tarde, en 1918 pasaron a regentar el negocio Cecilio Martín y Hermano.
Volvemos a Francisco Martínez, dueño de la de de la calle Santo Tomé. De su matrimonio con Gertrudis Gómez Vázquez, natural de Toledo, nacieron cuatro hijos: Rodrigo, Miguel, Agustina y Bienvenida.
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| Anuncio de la Confitería de Francisco Martínez en 1911. Archivo Municipal de Toledo |
Francisco Martínez y Gertrudis Gómez siguen con el buen hacer de la confitería y mantienen durante más de veinte años intacto el prestigio de sus productos, con el mazapán y los famosos albaricoques toledanos como productos estrella.
Al fallecer Francisco Martínez, le sucede su hijo Rodrigo. En 1922, ya figura la confitería a nombre de Hijo de Francisco Martínez.
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| Anuncio de la Confitería de Rodrigo Martínez en 1935. Archivo Municipal de Toledo. |
Rodrigo Martínez Gómez, con su esposa, Consuelo Caballero Almansa siguieron con la actividad de obrador durante más de 30 años, hasta el fallecimiento de Rodrigo en 1953.
Fue entonces cuando Ángela Ruiz Caballero, que había formado matrimonio con el empresario Jerónimo de Mesa, cogió las riendas de la confitería reformándola en 1954 y tomando el aspecto que tuvo durante varias décadas con sus escaparates con cristales redondeados en la entrada, tan típicos de los años cincuenta, y que permanecieron hasta la última reforma en los años 90.
No solo eso, después de tantos años siendo identificada el negocio con nombres masculinos, incluido Viuda de..., es Ángela la que aprovechando la reforma, establece la denominación de Santo Tomé, ligándola a la calle donde se ubica el obrador y la tienda.
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| Ángela Ruiz Caballero. Extraida del Diccionario bibliográfico de Castilla-La Mancha. |
En 1959, Ángela amplió el negocio a la Plaza de Zocodover, donde todavía perdura al lado del Arco de la Sangre.
Ángela y Jerónimo tuvieron tres hijos, Rodrigo, Ángel Luis y Juan Ignacio, el primer alcalde democrático de Toledo después de la dictadura franquista.
En los años 70 es Inés Gárate María, casada con Juan Ignacio de Mesa, la que se pone al frente del negocio por iniciativa de Ángela. Deja su actividad como profesora de Lengua y convierte la actividad en Santo Tomé en su gran pasión.
Inés Gárate modernizó el negocio acorde a los exigentes estándares de las industrias alimentarias y con ella se llevó a cabo la gran reforma de 1994 y la ampliación de las tiendas a otros barrios de la ciudad.
Actualmente, es la familia de Mesa la que sigue la tradición del negocio familiar, que cuenta con otras tres tiendas además de la de la calle Santo Tomé y su obrador. En la Plaza de Zocodover, en la calle Colombia del barrio de Santa Teresa y en la Avenida de Irlanda, en el barrio de Buenavista, está última especial para quienes sufren intolerancia al gluten.
Esta es la historia de la que seguramente sea la confitería más conocida en el mundo entero por su mazapán. Así lo debió entender también alguien con tan buen ojo como el gran Luis Buñuel cuando la filmó en 1969 su gran película toledana Tristana.
Esperemos que esa larga vida de Santo Tomé, no se interrumpa nunca, y para ello, podemos poner nuestro granito de arena, comiendo y/o regalando sus apreciados y estupendos productos.
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| Confitería de la calle Santo Tomé en 2025 |
Fernando Riaño Sánchez de la Poza.
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